Después de una semana de Rodríguez, esto es, solo en casa mientras mi señora y los críos disfrutan en compañía de mis suegros de una semana de alternancia climática, sol y lluvia según el día, en un pequeño y hermoso pueblo de la costa occidental asturiana donde veranea la familia de mi legítima desde hace ya varias generaciones, resulta que me levanto hoy viernes y al entrar en la cocina me encuentro a un fulano en la cocina preparándose el desayuno.
- ¿Quién hostias eres tú y qué cojones haces aquí? -pregunto tan sorprendido como enojado porque la italiana es de las pequeñas y me da que voy a tener que prepararme más café.
- Soy el de Amazon. El lunes llamé para entregarle un paquete y como usted estaba hablando al teléfono me hizo un gesto para que pasara dentro y..,
- Y te has quedado a dormir toda la semana.
En eso que aparece por la puerta de la cocina una moza que le interpela al otro tal que así.
- ¿Vienen esos cafés y esas tostadas o no vienen?
- ¿Y tú también quién cojones eres y qué haces aquí?
- ¿No me conoce? Soy la que limpia la escalera? El martes le llame para que quitara la basura que había dejado en el descansillo y me pidió por favor que la metiera dentro porque estaba atendiendo a una llamada muy importante y...
- Y claro, también se ha quedado a dormir.
- Bueno, voy llevando los cafés que hace ya un rato que estamos esperando en el salón para desayunar.
- ¿Todavía hay más gente?
En eso que me asomo al salón y casi me da un telele.
- ¿QUIÉN HOSTIAS ES TODA ESTÁ PUTA GENTE? ¡QUÉ COJONES HACÉIS TODOS AQUÍ?
- Yo soy el administrador y vine a comunicarle que...
- Yo vine a traerle lo del voto por correo...
- Yo llamé para hacerle una encuesta de intención de voto...
- Yo vendo miel a domicilio...
- Yo soy el vecino de abajo y vine a pedirle esa sal tan rica de Añana...
- Yo venía a revisar los radiadores...
- Yo hago campaña para el PACMA
- Yo estoy en el paro y...
- Yo traía la palabra del Señor...
- Yo un par de pizzas...
- Yo y mi familia estamos de vacaciones en Asturias y nos habíamos perdido...
Siento que me mareo, mucho.
- ¿Y esa señora mayor rubia todo maqueada en minifalda de cuero, top con estampado de leopardo y abertura en la que se le ve todo el tetamen? ¿Cuándo he pedido yo una prostituta?
- ¡Yo no puta, yo rusa! Yo vivo edificio enfrente y tú hacerme ojitos en la terraza todas las tarde.
- ¿EN SERIO? ¡ESTO NO PUEDE ESTAR PASANDO?
- Tranquilo, tranquilo. Claro, ¿tienes miedo de que aparezca de repente tu mujer y...?
- ¿Mi mujer? ¡Qué cojones! Lo que tengo miedo es que aparezca mi hijo mayor y me la monte porque siempre le regaño porque se trae gente a casa cuando se queda solo los fines de semana que nos vamos a Vitoria.
- Pues espera, porque todavía tienen que llegar los bomberos.
- ¿Cómo que los bomberos?
- Es que queríamos echar un piti en la habitación de los niños y...
Suerte que me he despertado a tiempo antes de que me diera un pasmo, que todo ha sido un sueño, la pesadilla de la semana, que de qué iba a estar toda esa gente en casa si los únicos seres humanos con los que he hablado durante toda la semana han sido por teléfono, si todavía estoy esperando a del voto por correo...
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