-Decía que...
-¿Qué, qué iba Ud. a decir?
-Pues que..., nada, paso.
-Si iba a decir algo, dígalo.
-Pero es que no quiero...
-¿Qué, qué es lo que no quiere?
-No quiero ofender a nadie.
-¿Por qué tenía que ofender a alguien...?
-Era una tontería que... una broma que... tengo un día muy tonto.
-No nos gustan las bromas.
-Ya...
- ¿Acaso insinúa que no tenemos sentido del humor?
-¿Yo? No, por favor. Si yo no deseo a las mujeres carnalmente, lo mío es todo muy espiritual y así. Además amo a todos los animales como si fueran miembros de mi propia familia; bueno, como que, de hecho, hasta estoy pensando en hacerme vegano...
-Ya veo, un converso.
-¿Eso es malo?
-Para nosotros todo es malo...
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