ALCALDE ARTARÁN

Ese babazorro que regresa en el año 2030 a Vitoria para asistir a la bajada del Celedón, que justo cuando se dispone a entrar en la plaza de la Virgen Blanca es interceptado por una patrulla de la policía municipal.

-Disculpe, ¿Adónde cree que va con eso?

-¿Se refiere a esta bolsa? Tranquilos agentes, no llevo ni puros, ni botellas de cristal. Es un bocadillo de panceta para comer algo mientras espero al txupinazo.

-Está terminantemente prohibido introducir bocadillos de panceta en la plaza.

-¿Cómo?

-Órdenes del alcalde Artarán para combatir el sobrepeso; no quiere que la gente se exceda en fiestas con la comida y luego pueda tener problemas cardiovasculares.

-¿Y quién cojones se cree que es el alcalde para decidir sobre mi salud?

-Por si fuera poco su bocadillo es de panceta. Hace meses que la corporación municipal declaró Vitoria ciudad vegana, ya no se permite...

-No me jodan, no me jodan. Primero que si las botellas de cristal porque nos podíamos cortar, luego los puros en aplicación de la Ley Sin Humos Generalizada que prohíbe fumar hasta en sueños, más tarde el consumo de alcohol en fiestas para evitar intoxicaciones y los comportamientos inadecuados de los borrachos que no saben comportarse, y ahora ni siquiera nos podemos comer un mísero bocadillo de panceta mientras vemos la bajada del Celedón.

-El alcalde Artarán sólo piensa en la salud y el buen comportamiento de los ciudadanos durante las fiestas.

-¡Les vuelvo a preguntar a ver quién cojones se cree que es el alcalde Artarán para decidir que no soy lo suficientemente mayor de edad para preocuparme yo solito por mi salud o saber cómo comportarme!

-Lo siento mucho pero no podemos tolerar semejante ataque de cólera. No queremos que sufra una subida de tensión. Debe acompañarnos hasta la unidad de asistencia sanitaria para que le suministren la preceptiva dosis de tranquilizantes.

-Ya veo, la somanta de hostias con las porras de toda la vida.

-Llámelo como quiera, este es un país libre...