viernes, 30 de agosto de 2013

PARAÍSOS




Pienso en mis amigos, en los que de una u otra manera componen eso que llamamos cuadrilla y que viene a ser el vínculo entre personas que han crecido juntos, han pasado por mil y una experiencias juntos, siempre han estado ahí y por ello establecido fuertes y hasta indisolubles lazos de afecto y lealtad que con el tiempo incluso se han extendido a sus parejas, y la verdad es que tengo que reconocer que en cuestiones de ideología e incluso de ver la vida cada uno somos de nuestro padre y nuestra madres, esto es, que así a grandes rasgos comparto tantas ideas con ellos como disiento en otras tantas. Dicho de otra manera, que entre mis amigos hay de todo, gente que vota nacionalismo moderado y hasta que milita en él, otros a los que no son tan moderados, si bien siempre según a quién y en qué momento, alguna que otra al PSOE, puede que haya algún simpatizante de EB o de UPD, y ya puestos, por tener, incluso tenemos una que confiesa hacerlo al PP y que a la que, mira tú por dónde, considero mi mejor amiga sin que las broncas por esto o lo otro hayan hecho merma alguna en el cariño que la profeso, estaría bueno. Yo también tengo mis inclinaciones, no voy a tenerlas cuando has nacido y crecido en un sitio y una época en los que la política lo contaminaba todo, absolutamente todo, eterno país de banderías y trincheras. Claro que sí, siempre las he tenido, unas veces más hacia un lado, otras hacia el otro, ahora vete a saber, exceptuando unos pocos principios para ir tirando por la vida y muchas dudas, demasiadas, si bien no sé si me he curado ya de una vieja sordera por una cuestión exclusivamente nostálgica o sentimental.

Pues bien, esto no tiene mérito alguno porque no es sino la consecuencia natural de lo que apuntaba antes, gente que ha nacido y crecido junta en un mismo lugar, que ha compartido un entorno y no pocos momentos. Ni siquiera somos originales en eso, qué coño, más bien diría que es la norma, lo lógico, al menos entre las cuadrillas de las grandes ciudades de mi país. Por eso no concibo aquellos que rechazan al prójimo por su manera de pensar, que prefieren rodearse de gente de su mismo credo antes que por gente simple y llanamente buena, y ya puestos a pedir, sobre todo divertida, que te haga reír, que lo haga contigo, que llene tu vida con buenos momentos y viceversa. He conocido unos cuantos de éstos, si bien el caso más particular fue uno que apareció un día en nuestro cuadrilla de la mano de un miembro de ésta y fue hacerlo y no parar de joder la marrana desde el momento uno. Hablo de un sindicalista e izquierdista de pro, de los convencidos (y aquí ya matizo de entrada, para aquellos que acostumbran a tener problemas con los matices, son como los daltónicos, que lo de sindicalista no entraña en sí nada peyorativo, descriptivo y punto, vamos, como si hubiera sido miembro del Movimiento de los Últimos Días o cualquier otra pedrada por el estilo), esto es, convencido de ser dueño de la única verdad revelada y por ello también de que aquellos que no la compartían, aceptaban o simplemente se plegaban a ella, no sólo es que estuvieran equivocados, sino que poco más que no lo hacían por maldad o estupidez intrínsecas, no podía ser de otra manera; había que reeducarlos. 

Pues bien, el señor se encargó de extender el mal rollo entre los miembros de la cuadrilla desde el primer día a cuenta de mira lo qué dice ese, cómo puede pensar eso y todo en ese plan. Más aún, teníamos previsto un viaje a Cuba del que al final se rajaron casi todos por diferentes razones menos servidor y el interfecto. Pues allí estuvimos, en lo que para mí era un destino turístico y para él lo más parecido a una peregrinación a Tierra Santa. Y claro, el chaval no cabía de gozo de poder ver con sus propios ojos en qué consistía eso del paraíso socialista con el que había soñado toda su vida. De modo que casi me excuso ya de explicar la tremenda chapa a la que me sometió el compañero sindicalista. Lo curioso es que a medida que pasaban los días y discutíamos más a causa de las “peculiaridades” del paraíso en cuestión; por mi parte esa sensación continua y desazonadora de falta de libertad con la que muchos cubanos parecían conducirse en su trato con los extranjeros, ese miedo permanente a ser visto en tal o cual sensación o lugar, más de un agravio comparativo entre los de dentro y los de fuera de la lista como consecuencia de las ocurrencias de politburó de turno para hacer frente a lo que entonces se llamaba “Periodo Especial”, esto es, a las dificultades para sacar adelante un país que había subvencionado su versión del socialista hasta la caída del Muro gracias a la generosidad de la ya extinta Unión Soviética y similares. Eso por mi parte, por la suya que si la libertad y la dignidad del pueblo cubano como tal, que si el enemigo americano y su bloqueo, que si la supeditación de lo individual a lo colectivo, que si aquí queda tu presencia, Comandante Ché Guevara, esto último tarareado casi que a todas horas y hasta en la misma Plaza de la Revolución bajo la propia y gigantesca efigie del comandante en cuestión sobre la fachada del Ministerio de Economía del que fue titular, asunto que daría para mucho, pero que para mucha zafra con el Ché machete en mano dado ejemplo, faltaría más. 

El caso es que hubo momentos en los que yo llegué a alucinar en colores con el sujeto y su capacidad para adaptar la realidad de lo que estaba delante de sus ojos a su propio ideario político. Una de ellas durante la comida con uno parientes s de una de mis tías. El padre médico y la mujer funcionaria eran lo más parecido a una clase media cubana, la hija un criollita preciosa a la que acompañaba su novio y compañero de carrera, allí ya apunto que quién más, quién menos, todos estudian para ingenieros… Pues bien, yo no sé si el camarada sindicalista se enteraba de lo que hablaban en la mesa –aquí subrayo que los cubanos, con lo que ya está todo dicho acerca de quiénes hablaban y quienes no…-. El padre y doctor contaba anécdotas de su experiencia en Angola, una de tantas “misiones revolucionarias” que emprendió el gobierno de Castro como mero peón de los intereses soviéticos encima del tablero de ajedrez de la Guerra Fría. Y no lo contaba precisamente como un disidente en potencia, ni mucho menos, era médico gracias a la Revolución en la que seguía creyendo y por ello también decía poder permitirse ser crítico en grado sumo con los dirigentes de entonces. Y eso el padre que era adepto, porque la mujer y la hija con su novio no pararon de despotricar contra el régimen y sus arbitrariedades o sin sentidos, su falta de libertad y de horizontes, amén de contar toda una retahíla de anécdotas de su peculiar manera de “resolver”, como dicen “allá”, el día a día y en el que la picaresca, cómo no, es la principal protagonista. Pues bien, de todo lo hablado por ellos durante la comida el camarada sindicalista sólo sacó en claro que el Ché era la persona maravillosa en la que siempre había creído y que el resto, los actuales –siquiera de entonces- jerarcas comunistas poco más que una casta de chupópteros privilegiados que habían pervertido y traicionado los principios socialistas que el argentino había ayudado a establecer en la isla con forma de lagarto. No se fue poco contento ni nada el chaval con su monedita de cien pesos con el careto del Ché y dos libros que nos regaló el padre a cada uno escrito por el comandante, “Con la adarga al brazo”; no he conseguido llegar ni a la mitad, me entran ganas de tirarme a una balsa en mitad del Cantábrico

Pues bien, qué le iba a hacer yo si el camarada quería obviar que el Ché había sido precisamente el máximo exponente de esa arbitrariedad e improvisación que aquejaba al régimen desde sus principios, motivo por el que además, pocos lo niegan ya, el comandante Castro poco más que le invitó a abandonar el ministerio de economía y le animó a que se fuera a extender la revolución al Congo Belga, literalmente. Pero claro, es que si hablamos de contradicciones … pues oye, no quedaba muy bien empeñarse en invitar a la hija de nuestros anfitriones y a su novio a un daikiri en el famoso Floridita cuando el precio de uno de ellos en dólares era el equivalente al sueldo medio de un cubano en pesos. O ese otro empeño de querer subirse toda costa a la habitación del hotel a dos compañeras cubanas para rubricar vete a saber qué acto de solidaridad revolucionario sobre la cama aprovechando el privilegio de todo turista extranjero de poder pagar con dólares en las tiendas especiales para ellos productos que a un cubano le costaría también más de un sueldo. Y aún así, erre que erre con lo del paraíso socialista. Qué haces cuando no paran de darte la murga con el monotema. Otros no sé, puede que tiren de recortada o algo parecido, yo recurro al sarcasmo, a la coña marinera. Y de ese modo, si bien ya estaba hasta los cataplines del comandante turista, creo que el día de nuestra fractura definitiva como pareja de viaje no fue otro que aquel día por las calles de Santiago, cuando a la vista de un tremendo cartel con la leyenda “Avanzando hacia la Victoria Final”, justo en ese momento paso una destartalada furgoneta por delante rebosando de cubanos. En buena hora se me ocurrió comentar en voz alta “¡juntos y apelotonados!” No me lo perdonó, ni eso ni las veces que le advertía de haberse olvidado el póster del Che Guevara que llevaba a todas partes como el souvenir más preciado de cuantos pudo comprar gracias a nuestros dólares imperialistas. Pero claro, es que tampoco yo perdono ciertas cosas, y entre ellas que el personaje en cuestión se hubiera dedicado durante los primeros días de nuestro viaje, yo incluso diría que nada más sentarnos en el avión, aprovechando esa inevitable y en este caso sumamente molesta intimidad de los que viajan juntos, a poner a bajar de un burro a miembros de mi cuadrilla, esto es, a hablar mal de mis amigos porque éste votaba una cosa y la otra pensaba otra, a criticar cualquier aspecto de la vida de esto como si alguien le hubiera designado a él juez supremo o algo por el estilo. Y como además no era permeable a crítica o advertencia alguna, este tipo de gente no suele serlo, que no asimilaba ideas tan básicas como la de que cada uno es muy libre de pensar o hacer lo que le dé la gana y yo no juzgo a las personas por lo que piensas sino por lo que hacen y sobre todo por cómo se comportan conmigo. Pues lo que digo, erre que erre en su afán de juzgar a todo Cristo que no compartía su mismo rasero. Un suplicio del que yo me resarcía con su correspondiente dosis de pullas, por lo que no es de extrañar que antes incluso de coger el avión de vuelta estuviéramos a punto de llegar a las manos porque hay personas que sólo saben recurrir a ellas cuando ya se han quedado sin eslóganes o lugares comunes, cuando ya no les queda más en la cartilla en la que llevan apuntado lo que es correcto y lo que no según dicta su propio credo. 

Desde entonces creo estar ya vacunado de los tipos que van por la vida imponiendo la suya a los demás, haciendo caso omiso de ese dicho bíblico –y aquí al decirlo el sujeto en cuestión seguro que ya me habría reprochado la cita con la monserga esa del opio del pueblo y bla, bla, a mí que ni soy creyente ni nada por el estilo- del “no juzgues y no serás juzgado”, los que necesitan estar rodeados de gente que piensa como ellos para poder sentirse a gusto o puede que sólo seguros, gente que si pudiera llegado el caso no dudaría en mandarte a un campo de reeducación, esto es, a su gulag particular, para joderte por no pensar como él, sólo por eso. 

¿Y a qué vienen tantos párrafos? Pues mira, no lo sé, pero ha sido conocer la noticia de que el patético timonel norcoreano había mandado fusilar a su antigua amante y venirme a la cabeza la idea de que seguro, seguro que hay alguien que, lejos de ver en ello un puro y simple acto típico de un tirano, intentaría convencerme de que no, cosas dices, alienado estás, intoxicado por los perversos medios occidentales que dicen lo que quiere el Capital que creamos, que Corea del Norte es una dictadura comunista en manos de un líder grotesco en lugar del último y más puro bastión del mundo verdaderamente libre y todavía más justo e igualitario. Y conste que el que subscribe esto sobre los paraísos socialistas en cuestión no es precisamente un cachorro de oligarquía alguna, sino más bien el nieto por parte materna de un comunista de los que decían de la alpargata, capataz toda su vida de una conocida bodega jarrera y que no renunció nunca a su carné del partido, alguien que salvó la vida durante la guerra gracias a un cuñado y jerarca carlista de su pueblo mientras dejaba atrás en la cárcel y en la cuneta a sus dos hermanos, alguien del que siempre me cuenta mi madre que la única vez que le puso la mano encima, la única que le soltó una hostia de esas que decimos bien dadas, fue por haberle replicado a su vuelta de Venezuela que la Unión Soviética no era el paraíso socialista en el que él creía sino más bien una cárcel a gran escala, que era lo que le habían contado a ella en Caracas las compañeras de trabajo que habían podido huir de sus respectivos paraísos socialistas.

ARBASOEN BERBAK



Bitxikeriak bitxikeria, oso atsegin ditut hildako hitzak, beharko historiazalea naizen aldetik tokian tokiko hizkuntza zein antzinako bizimoduaren iraganaren berri iturri ageria direlako. Horrenbestez, eta nolabaiteko ekarri baten modura txoko honetaratako, hona hemen Koldo Zuazok berak bere "Arabako Euskara" liburuan biltzen zituen hainbat arabar jatorrizko euskal hitz zahar eta hil, hauetariko batzuek badute gainera Mediterraneo isurialdeko euskal kutsu peto-petoa. (ez dira, ez, Euskal Herrian antzinatean erabili eta zendutakoetarikoak edo Araba inguruetako herrialdeetan ere gaur egun erabiltzen diranak (amarratz, atxitamatxia, eraxegi, garranga...), ez, hauek dira Araban baino jaso egin ez direnak)


-agar = arantza (Landucciren hiztegian: arrayan agarra).
-almuazai = ganaduzain
-amitz = atximur
-asabeaita = aitajaun, aitaita, aitona, aitatxi
-asabeama = amamdre, amama, amona, amatxi
-ate = kanpo, landa, at (etxetik ate)
-aun = zaunka (Landuccin: chacurrac, edo orac aun eguin)
-beatza = mehatxu
-berroju = kisketa (hau arraroa Arabako erdaran "kiskete" erabili ohi baita "berrojo" hitzarekin batera)
-bixiga = garatxo
-dornu = txirrika
-eguaun = eguen, ostegun
-ehe = lixiba
-errai = bizkar
-errexal = zuhaitz txikia
-frikatu = igurtzi
-guia = seaska (Urdiainen "kuia")
-idogi = kendu
-iramon = jaurti
-isusi = eskobatu
-isuski = erratza, eskoba
-kakatorio = komun
-karpentari = igeltsero
-korronka = zurrunga
-koskitu = hozki
-llobaide = lehengusu
-maki = mordo (Landuccin: masç maquia - mahats mordoa)
-mokalde = masail
-ogen = oker, zeharka
-oin erresabel = oinazpi
-okelu = txoko, bazter
-ontzak egin = onezkoak egin, adiskidetu
-saltokari = kilker edota oti, larrapote
-sehitrapu = pixoihal
-torta, tortaka, tortari = laster, lasterka, lasterkari
-triskak = kriskitinak
-zapallor = igel
-zapelari = belatz
-zipi = pozoi

DE CUANDO LOS PÍCAROS NO ESTÁN EN LAS ACERAS



Hay un personaje entrañable en Oviedo, un señor mayor que por su acento supongo de origen balcánico y su aspecto zíngaro o así, el cual se dedica a tocar el violín en la calle a cambio de dinero, un busker que dicen los anglos y también no pocos tontolabas ni nada hablando en castellano. No es que lo toque mal, no, es que no tiene ni puta idea, no es que toque de oído, es que parece que lo hace al revés, no afina ni por descuido, cualquier melodía conocida en su violín acaba pareciéndose al ruido del motor de una cosechadora o algo por el estilo. No obstante, o puede que precisamente por eso, para que deje de tocarlo siquiera por unos segundos, recibe más propinas que cualquier otro músico callejero. Aunque no, claro que no, esa es la broma más o menos chusca, la realidad es que esas propinas se deben más a su proverbial simpatía, su don con los niños incluso, su caballerosidad con todo el mundo y acaso también hasta la solidaridad que inspira su ajada y melancólica figura. Pues bien, este entrañable personaje de las calles de Oviedo no podría ganarse la vida como lo hace en Madrid. Acabo de escuchar que el ayuntamiento de esa ciudad tiene previsto exigir a los músicos callejeros que pasen un examen de conocimientos musicales para poder ejercer en las calles. Y aquí ya no se trata de despotricar contra la desvergüenza ya casi que innata de la casta política en su afán de hacer caja a toda costa del prójimo y en especial del más débil, de romper una lanza a favor del derecho de cada cual a ganarse la vida como le venga en gana, a reivindicar esos principios de la libertad de mercado que tanto parecen irritar a algunos porque gustan de meter todo en el mismo saco para tirar de maximalismos bien que añejos y que vendrían a establecer que el ciudadano es muy libre de recompensar a unos por su destreza o lo que sea y de pasar olímpicamente de otros si así lo que cree conveniente. No, eso no es lo que procede, no principalmente. Lo que procede es recordar a estos miserables del ayuntamiento de Madrid lo obvio, que nadie está en la calle ganándose la vida por gusto sino porque no le queda otra, asunto que por lo que se ve algún que otro hijo de puta también pretende hacernos creer que es lo más parecido a un privilegio.

ZURE IRRIFARREA...



Bixente S.I lagunak behin berriro iradokia. Berak dioenez: "Ezagutzen ditugu Montororena bezalako irribarreak, Raxoiren egiak baino faltsuagoak. Ezagutzen ditugu Wertena bezalako irribarreak, harropuzkeriazko auto-askitasunaren logo gisakoak. Eta badaude atzealdean asasino hotz bat hautemateko zirrikitu estuak diren irribarreak, teniente frantses honen antzekoak, teniente ez bereziki gaiztoa, bai aldiz Indotxinan goitiko aginduak karrez betetzeko beti prest, goikoek sarri nahiko luketen baino kar handiagoz".

Eta nik, gogoeta arin-arina ein eta gero, zera ondorioztau ein biot, badagoela beste irribarre mota guztiz berezi bat, agian zabalduena, arruntena, tamalez zure bikotean familia jasan beharrian zaozela halabeharrezkua. Hau da duda barik amasorginena da. Irribarre ezin oker eta faltsuaua, zitalaua, beti ezpainetan fin-fina eta tente-tente. Ez da apenas aldaketan ezpainetan behin marrazturik, nabarmen da hak ikaragarri ondo saiatu dauena ekinan ekinez. Esan moduen, oso arina emuten dau printzipioz, bai, ia ikustezina ezpaineratzeko ein beharreko esfortzua dexente jakolako andrazkoai; baia, bada aldi berean be izugarri zorrotza eta zurruna, eguna zapuzteko gauza, bizia garrazteko ezin eraginkorragua, zure bikotearekikua izorratzeko oso arriskutsua. Bai irriparre maltzurra, amasorgin...ginarreba zuri begira edo adi dagoela ezin nabarmenago adierazten dotzuna: "neure alaban gizona zare, senarra izateko potruak ez daukotzunez, noski, baita nire lloben aitta be, "zeingotzat nik", eta jakin badakit aguantau behar zaittudala nahitaez, baina zelako astapo..." Zorionez, zerue hodei baltzez zein gogoa gogotik ilunketan dotzun irribarre hori zeure ondotik desagertu bezain laster bizia bere onera bueltau ohi da ezin arinau be bai eta ni neu pozarren, ointxe bertan niri suertau lez; bizitza zoragarrixa da.

lunes, 26 de agosto de 2013

PERPLEJIDADES


Hoy sí, hoy preparo una ensalada de tomates como Dios, Alá, Shiva o Amalur mandan, de tomates de la huerta de mi viejo, unos tomates bestiales, salvajes, supuran sabor hasta por lo agujeros por los que se les han metido los bichos indiferentes al veneno, si es que le ha echado mi padre, claro, unos tomates feos como deben ser, con su costrilla alrededor del rabillo, de formas sin geometría reconocible alguna, cada uno de su flor y no del ingeniero agrícola de turno, algunos incluso del tamaño de los cojones de Bárcenas, impresionantes. Así que con esto y unos filetes ya tenemos el menú del día, el cual preparo con tanto mimo como perplejidad por lo que oigo por la radio. ¿Observadores de la ONU en Siria? ¿Observadores de qué? ¿De lo obvio? Sigue la comedía de la vida, como que también asisto perplejo a la reacción que provoca entre cierto sector del rojerío patrio la amenaza del yesgüican de intervenir militarmente en Siria, poco más que se echan las manos a la cabeza con la excusa de que si otro Irak, y no es por eso por lo que me admiro, no, que entiendo los reparos al hecho de que con la excusa de proteger a la población civil se masacre todavía más a esa misma población, sino por el hecho de que a esa gente le despierte de repente simpatía el dictador sirio por el sólo hecho de que tiene a Israel en su contra, de que esto de la intervención parezca haberlo consensuado Obama con el Netayanhu. Y es que servidor confiesa que no entiende nada, sobre todo de las simpatías de la gente, de su necesidad de posicionarse a toda prisa en el negro o en blanco, y no digamos ya nada de establecer prioridades de acuerdo con el credo de cada cual, no con lo que el sentido común te dicta como persona de bien y que asume ciertos valores universales como principio, no, sino de acuerdo con el credo, la bandera, la trinchera de cada cual. Porque me digo yo, a mí también me revienta, me asquea, la política de Netanyahu y los suyos contra los palestinos y en especial la hipocresía de nuestro entorno occidental para con su drama; pero, ahora no es el tema, me digo que ahora la prioridad sería acabar con un tirano que masacra a su pueblo, que sí, intervención armada no, acaso como en Libia. Pero no, en seguida salta alguno con lo de que para ir de guatemala a guatepeor mejor quedarnos como estamos, lo que viene a ser un "que se jodan" en toda regla. Y eso si no te saltan también con el "¿por qué en Siria y no en...", pues también, también, en un mundo perfecto las tropas del mundo libre llevarían la libertad y la democracia a todos los confines del globo cual ejército libertador. Pero no, si es que van a meter la mano las americanos mejor que se queden como están, esto es, Al Asad, Gadaffi o Sadam en sus poltronas. Que sí, no lo han hecho poco mal ni nada en Irak, o quizás demasiado bien para sus intereses espurios y así; pero, ¿no se puede aprender de los errores o es que ya la opinión pública ha perdido todo su poder de indisponerse contra los gobernantes por muy en plan gran hermano que se pongan? Conste que esto lo escribo con la ingenuidad de aquel al que lo único que le motiva es que se ponga fin a las iniquidades de un criminal como el Asad, a todas a ser posible, faltaría, que ya sé, ya, que hay tipos muy sesudos por ahí que me dirán que las cosas no son así de fáciles, que si peco ya no de ingenuo sino incluso de alienado por el sistema y toda la hostia, y ya puestos hasta un defensor del Imperio y prosionista, que la verdadera tiranía está en casa y la democracia pura y genuina en Cuba, Venezuela e incluso en Siria. Pero ya digo, yo lo que tengo es un verdadero cacao encima, no como otros que lo tienen todo bien clarito, suertudos.

HARRI ETA ZUR


Geratu naiz harri eta zur (edo agian ez, agian ohituegi gaude halakoetara) perutar jatorriko madrildar editore batek egindako iruzkinaz, bai, editore diot, ez Madrilgo taxilari. Badirudi oporretan Cataluniara joan zela bere bikotearekin eta hara hor ia dena katalanez idatzita zegoela topatu behar. Areago, jatetxe batean karta gazteleraz nahi zuten galdezka joan zitzaiela serbitzari lotsabakoa! Jakina, zer dago jokaera horren atzean, ba oso pentsaera zehar eta zehatz bat: Espainian gaudenez eta espainola eta gaztelera hizkuntza berbera direnez, Espainian edonora zoazela gaztelera beti nagusi, lehenengo hitza beti gazteleraz. Hori da, ez gizalegea, indar-legea baizik, Espainiako herrialdeetako hizkuntzak hezkuntzan zein administrazioan baztertuta/zapalduta/debekatuta zeudeneko inertziaren puruz espaniar eta atzerritar asko eta askoren katalanarekiko zein bere modukoekiko jokabide erdeinaria, atzerrian zeharo arruntzat hartzen dutena, hau da, gauzak bertako hizkuntzaz idatzita topatzea zein bertakoek euren hizkuntzaz egitea, Espainian inondik inora ez, hemen hizkuntza bakarra gaztelera izan behar delakoan, Espaina osoa Gaztela zabaldu bat bailitzan, eta horrenbestez hizkuntza uniformazio hori kolokan jartzen edo zatartzen duen oro, hots, tokian tokiko hizkuntza zatarrok, izugarri ernatzen dituzte, atzerrian baleude bezala sentiarazten dituztelako, bertako ia guztiak elebidunak ez balira bezala, euren Espainia ulertzeko ikuspegiak katalan askoren independentzia gogoa errotik zurituko ez balu bezala Espainia posible egiten ez dutenak Gaztela handi eta elebakar bat bezala baino ulertzen dutenak ez balira bezala. Bai, badakit betiko leloa dela, ez dudala ezer berririk irizpidera ekarri, eguneroko soka-tiraren kontura enegarren huskeria, bai, baina adierazgarria bezain ernegarria ere bai, banatzen dutenak ez baitira betikoek aldarrikatu ohi dituztenak.

EL PORTALÓN


Recién comido y todavía no he leído los periódicos que compro casi que por inercia, para amargarme la existencia y poco más, que soy muy sentido o casi. Y por eso, por eso casi también que me apetece más hablar de la ilusión que me ha hechoencontrarme a la mañana abierto de par en par El Portalón de Vitoria. Que ya era hora, coño, ya, de que dejaran a la vista del paseante, del curioso, siquiera para echar una mirada al interior, uno de los que probablemente podemos calificar de edificios más emblemáticos de Vitoria, la antigua casa de postas del XVI donde iban a parar todos los viajeros que paraban por la ciudad, como aquel papa al que le dieron noticia de su nombramiento justo al poco de arribar a la ciudad. Se trata, además, de uno los rincones de más genuino sabor medieval del casco viejo de Gasteiz, con la plaza de la Brullería, la Torre de los Anda, varios palacios como los de los Maturana o los Gobeo-Landazuri y la trasera de la catedral vieja completando un trazando sencillamente maravilloso. Y por eso, y porque el entorno siempre me ha parecido desaprovechado (esto es, para cualquier cosa que no sea el botellón de los yogurines en exclusiva), y a pesar de los establecimientos contiguos al susodicho Portalón, me ha entusiasmado ver abierto de par en par el viejo portón de madera que alberga ya desde hace décadas un restaurante (yo todavía me acuerdo de haber ido de pequeño con mis padres varias veces durante a saber qué aniversario e incluso cuando estaba Santxotena de cocinero, artista en entre los fogones y también con la madera, ahora tiene un museo en Arizkun, Baztán, dedicado a la memoria de la raza maldita de los agotes de la que desciende). El caso es que siempre me fascinó El Portalón por su historia, su ubicación, sus vigas centenarias, su suelo y muros de piedra y de alforja, y en general ese aire mágico o casi de fonda medieval que mal que bien se respira siquiera en su entrada. De cualquier modo, qué menos que abrir el portalón en cuestión para que la gente entre y admire el interior con la excusa de echar un pote en la barra, improvisada o casi, que han puesto donde antes estaba la recepción, eso y también para echar un vistazo en la bodega y sala de exposiciones de los vinos más reputados de la provincia y alrededores; pena que siempre sean los mismos por mucho que presuman de promover los caldos alaveses, qué pocas marcas que uno no pueda encontrar fuera o en cualquier otro establecimiento de la ciudad, dicho de otro modo, hay más mundo, más bodegas riojano-alavesas, tan dignas como únicas en su modestia, que las que te puedes encontrar en cualquier estantería de un supermercado, esto es, las de Luis Cañas, Baigorri, Artadi, Izadi, Valserrano y por estilo, ya nos entendemos. En cualquier caso, una forma como otra cualquiera de ampliar la oferta turística o así del casco viejo con su catedral, sus murallas, palacios, iglesias, torres, placicas, etc. Porque cuesta creerlo, sobre todo para los de aquí que tendemos a imaginar nuestra ciudad como un balneario a gran escala y con mucho jardín para sacar a sacar al perro, green total, oyes; pero, hoy la ciudad estaba a rebosar de turistas, esto es, tipos con la cámara fotográfica al cuello, tipos estirando el cuello hacia las fachadas y torres y mucho acento exótico. Así que qué menos que sacar a relucir los no por modestos menos lustrosos tesoros de la ciudad secularmente ensimismada, la que nunca gustó de mostrarse excesivamente coqueta no la fueran a confundir con lo que no era, receptiva para el turismo, casi que acogedora, como que me da a mí que si vas con cámara al cuello los camareros no te gruñen (de hecho he visto está mañana a un turista sacarle fotos a una bandeja de pintxos y el camarero, el lugar de gritarle que a ver si se los iba a estropear o algo por el estilo, hasta le ha sonreído, le ha hecho gracia, gracias por su visita, vuelva usted cuando quiera. Pues eso, cómo cantaba un entonces conocido grupo de aquí de casa: "nola aldatzen diren gauzak, kamarada! (¡cómo cambian las cosas, camarada!)."

HODEI BELTZAK


Atzo Gasteiza iritsi ginela eguraldiak hiriko abuztuko jaiez geroko giroarekin bat egiten zuela zirudien; hau da, jaiak pasa eta gero udara, inor hirian ez ez dagoenez, kendu balute bezala, hau da, ez gastatzeagatik. Dena ilun zegoen, den-dena, zeru beltza, eguraldi hotza, kaleak hutsik hor nonbait agian ere polbora usaina... Abuztoerokoa, txikitandik jaso egin dudan zirrara inora joan ezin zinela eta hiria nahitaez geratu behar, barrualdeko hiri guztietako giro ilun eta goibela, hitsa, Madrilen zein Eibarren bertan (gogoratzen dut gaztetan Eibarrera autobusa hartzera gindoazela etxera bueltatzeko edo, eta zer-nolako hirimortua bero sapa eta guzti kale gris, hits eta hutsetan). Edonola ere (nik uste galdu egin naizela bazkalosteko post aspertu honetan), baita giro goibel eta iluna gurasoen etxe erdi zabartura iristen zarela, gurasoenean aspalditik ia dena ere goibel et iluna baita eurak zaharkituegiak somatzen dituzula, baita etxean bakarrik somatzen dituzun aldetik inora joateko gogo zein indarrik gabe ere, bizian amore eman balute bezala edadea zein gaitzak, ondoezak, bizitzaren nekeak zein nekeak direla medio. Eta gero gerokoak, azken asteotako gorabeheren berri ematen dizutela, minbiziak eroandako koinatarena edo Ameriketako lehengusu horren azken edo enegarren zatarkeria umetatik maite edo estimatzen duten guztiak haren mendekoak baino ez balira bezala tratatzen gaituelako, pertsona oro balizko morroia ez balitzaio bezala, guztiak haren aginduetara baina hura sekula ez, gainontzekoen lepotik bizitzea lege egin balu bezala guztiz ezaxola ondokoak jipoika tratatutakoan berdin maite edo estimatzen jarraituko dutelakoan. Tira ba, atzo arratsaldean zein gaur goizean goiz denal ilun eta goibela ematen zuen, lehen esan bezala, udara abuztuaren lehenengo astea pasa eta gero udaroa bertan behera utzi balu bezala udalak aurreztearren krisis garaian. Zorionez, hiria bajatu, aurreneko pote zein pintxoa eskatu eta eguzkia hantxe bertan zeru gainean paratu egin zaigula, gauzak oso bestela ikusten baitira horrela, dena unean uneko engainua edo direla ondo asko jakinda ere.

DEJA VU



Deja vu? Benetan diok/n? Tira ba, ni orduan ume txiki baino ez nindua/nan hori gertatu zenean Egipto maitean, bai, ume eder bat ikusi nuen Gasteizko kaleeeean, hitz erditxo bat hari esan gabe, nola pasatu parean? Gorputza zuen liraina etala, la, la... Zer hostia ari haiz, ni seriotan eta hi kantetan, adar joka edo? Lasai motel, ez nauk/n ni, bizitza baino. Gainera, zer nahi duk/n egitea, dena errepikatzen duk/n pepinoa bezala. Baina ez zua/nan aspaldi Fukuyama izeneko japo batek historia bukatua/amatua/finitua zela? Faborez, ez ezak/n aitatu izen hori nire aurrean. Historia etengabeko amesgaiztoa duk/n. Ezetz ba, aurrera goazela etengabean, progresoa geldiezina duk/n, horiek dituk/n unean uneko eragozpen hutsak, arazotxoak, aurrerapausoz aurrerapausoz goazak/n auskalo noruntz. Baina hi hago lasai, dena konponduko duk/n, munduko herri guztiak libro izango dituk/n laster, demokrazia mundu zabalera hedatuko duk/n, emakumezkoak gizonezkoen pare izango dituk/n, gizakien arteko ezberdintasunak orekatuko, bidegabekeriak bukatuko, gerrak desagertuko, gabeziak ezabatuko...ametsetan bizi nauk/n.


Hi! Aski duk/n, hi haizena, etzakia/nala nik nor haizen, ez izorrau, arren, ala ez al duk/n aitu Mubarakena? Mubaraken zer? Zer, zer, arabiar gaixoak, erdaraz espainiar kulturaren buru goren batek esan bezala gutxi gora behera: ¿quién les pone la pierna encima para que no levanten cabeza? Mesedez, euskara garbian. Ba hori, "ibili guztia erromeri! Zer? Hik ederto ulertzen didak/n!

miércoles, 21 de agosto de 2013

PROPUESTAS INFORMÁTICAS


Pues aquí estoy de nuevo un mediodía más, las tres de la tarde y esperando a mi señora tras despachar la comida de los críos y preparar un pedazo de ensalada de tomate (¡ay, ay, cómo añoro los tomates de la huerta de mi padre o de cualquierotra huerta!) y preparándome para la segunda tanda de bonito a la plancha que he dejado toda la mañana macerando con salsa de soja, pequeño truco del almendruco que diría el maestro de los fogones y que tiene como objetivo hacer lo menos posible el bonito a la plancha para que quede bien tierno y jugoso por dentro, cosa de japoneses. En todo caso una jamada imposible más de verano, que mira que me gusta el bonito y lo difícil que es convencer a la peña, sobre todo a la de cierta edad como mi madre, de que hay que hacerlo prácticamente como una chuleta a la plancha, que esos trozos de bonito del marmitako o con tomate y pimenticos de tiras todo secos le quitan toda la gracia. Pero ya, ya, todavía recuerdo este verano mi viejo y un servidor haciéndose un marmitako, esperando al final de la cocción de las patatas para echar los trozos de bonito ya con el perolo retirado del fuego, y mi señora madre que entra en la cocina, mete la cuchara, juzga que a su entender están crudos, y venga, de vuelta al fuego; no la estrangulamos porque para qué, si luego seguro que resucita y nos hace algo parecido con la merluza en salsa verde. Pues eso, a ver si llega mi cariñín de una puta vez, que tampoco es que tenga nada interesante o trascendente que escribir y aún así, mira qué le he cogido ganas a esto del facebook para los tiempos muertos. Luego ya viene lo de discutir con la peña, no hay pocos equívocos ni nada. Como no estamos como las personas civilizadas junto a la barra de un bar o sentados en una terraza discutiendo frente a frente, pues eso, que a la menor salida de tono la gente se mosquea, se revira o vete a saber, que se siente mal, anda que no llevamos poco mal ni nada que la peña no piense como nosotros, que si no me comprenden, que si eres esto o lo otro. Pues qué se le va a hacer, joder, tampoco vas a caer bien a todos, ni ganas. Otra cosa es cuando te malinterpretan o te acaloras en exceso con alguien que estimas, pues claro que jode, el problema es que cuando pasa eso luego no hay forma de invitarle a un ciberpote a esa persona, que es como uno ha zanjado las discusiones toda la vida con sus colegas y también más de una bronca de tirarse los trastos a la cabeza o mentarse a la madre. Pues eso, lástima, ya lo decía, todo se andará en esto de las nuevas tecnologías. Porque, a ver, quién te dice a ti que en unos pocos años no inventan, como inventaron la mierda esa de Skype, que maldita las ganas que tiene uno de ver la jeta al prójimo estando incluso en gayumbos, un dispositivo en el ordenador con una especie de caño que suelta el pote en cuestión dándole al botón "Pagar un pote a fulanito. Elegir: zurito, chato, mosto o txintximiña", algo así como la fuente de vino que hay a la entrada de las Bodegas Iratxe en Ayegui, que cuando te lo cuentan parece el sueño de todo borracho y una vez allí ya no es para tanto, el vino sale calentorro de cojones, no hay quien lo beba, cómo que no se habrán dado cuenta ni nada. Pues eso, que nos hemos quedado con mal cuerpo porque hemos discutido, vaya por Dios, pues habrá que esperar a que los genios informáticos solucionen el problema, y entretanto, pues oye, si eso compra una botella de buen vino y congelas un cordero para cuando nos veamos en tu txoko o donde sea, qué coño.

HONDARTZAN AITA



Izan da egundoko bero sapa gaur egun osoan, horrenbestez T etxera iritsi orduko bazkalostean hondartzarantz alde egiteko proposatu digu eta denok noski baietz batera eta ia oihuka, dagoeneko nik uste auzoek badakitela oporretatik bueltan gaudena. Rodiles alderaino joan gara. Zer esanik ez, hondartza leporaino zegoen, baina arratseko seiak aldera iritsi garenez hustutzen hasia zegoen ere. Eta bai, ordurako sargori gutxi, egia esan haizeak izugarri gogor jotzen zuen eta. Izan ere, olatuak itsas-ertzean lertzear zeudela haizeak aparra itzultzen zizun olatua zure gainetik pasatu orduko. Eta hotza, ikaragarri hotza zegoen. Nagusiarekin uretara sartu naizela oin plantak di-da jelatzen zitzaizkidalakoan egon naiz, zinez diot, min ta guzti hartu egin dut. Nire seme nagusia ordea itsasoko aurreneko uhinerantz abiatu da zoru moduan, hotzari soraio. Orduan, jakina, bere atzetik joan behar izan dut halabeharrez, zer esanik ez, kabroi halako horrek gogara ziprinztindu nau. Ondoren, txikerrak uretara nire eskutik sartzeko hots egin dit urertzetik. Zipriztin eta hozkirri gehiago, umemokoak nahi beste, eta zin dagit ene ustetan ura gero eta hotzagoa zela. Orduan, umeari besoetatik oratutakoan olatuen gainetik altxatzeko nire inguruko aitei erreperatu diet, denak aitak baitziren, denak omen zeuden nire gisara euren umeekin uretan olatuen oldarrari adi-adi badaezpada, badaezpada ur lasterrak Irlandako kostalderaino arrastatzen zituen beren umetxoak, eta baita aita guztiok nire modura ere ziharduten hankak uretan sartuak baina zipriztin zein uhinen hozkirriaren beldur eta olatuak pasa bezain laster tente-tente jartzeko irrikan albait gutxien bustitze aldera. Orduan bai, orduan jabetu egin naiz aita askoa eginda nagoela, aspaldi utzi egin niola benetan atsegin zaizkidan gauzak egiteari -uretan txipli-txapla egitea kasuko- nire seme laztanek beraiek goza ditzaten. Eta ez, gaurkoan ere ez diot hondartzari, hots, hondarren gainean etzanik egoteari, grazia bilatu, sentitzen dut.

SEGUNDO DÍA



Segundo día de la vuelta momentánea a la rutina. Segundo día de brega también con esos dos monstruos que hasta el doce del próximo mes no empiezan el cole. Una locura esto de atender a los críos, desayuno, baño, ocuparlos, regañarlos y separarlos cada vez que se zurran, limpiar detrás de ellos, hacer la comida, dársela y al mismo corregir dos trabajos en el ordenata, atender llamadas con sus gritos de fondo y también, porque para todo hay tiempo, entrefacebookear algún que otro comentario con gente que estimas y que te alegra la mañanica con su ironía y/u ocurrencias. Pero cansa, el nene jodiendo con la pelota o el otro con el pantalón por las rodillas y un rollo de papel higiénico en la mano, impiden concentrarse en las correcciones, que de lo otro ni me esfuerzo, y si a eso le sumamos que el wifi de los cojones va y viene como una novia mala de la adolescencia, pues eso, un cañazo. Y sí claro, mira que escribo pijadas, que lo sé, que me quejo por cada tontería, ¿todavía hay alguien que no sepa que es una pose?, angelicos, cómo si no supiera que hay gente con problemas de verdad y todos los que tú quieras. Pero lo hago en este descanso frente al ordenata tras haber puesto a hacer un pisto de urgencia una vez finalizado y recogido lo de los críos, que viene a ser cuando tu pareja te dice que de patatas a la marinera na de na, los mejillones y langostinos para otro día, tripón, que yes un tripón, que hay verdura que se va a pasar y a ver qué haces con ella, así que a pelar trocear y pelar como loco ajo, cebolla, pimiento verde, tomate, zanahorias, puerro y los calabacines del pueblín, con trocicos de jamón serrano para darle gusto, ahí échale también algo de caldo para que poche bien. Y lo hago para decirle al feisbook este preguntón e indiscreto que sí, que todo lo agobiante que tú quieras, súmale el calor que entra por las ventanas desde un quinto piso, y aún así qué gozada estar de vuelta a casa, en tu intimidad sin tener que rendir cuentas a nadie o mirar por dónde pisas, qué dices y para qué, como de bulto por la vida y poco más, mirando el reloj, cagándote en el calendario, disfrutando por fin de tu cotidianidad con sus inevitables altibajos y sobre todo de los críos, y también, también, esperando que tu "azukre koxkorra", expresión que no pienso traducir de puro ñoña, pero que es la que me viene a la cabeza y no otra, aparezca de un puñetera vez por la puerta para echarle los huevos al pisto y sentarnos a comer en plan a ver qué nos dicen hoy del Rajoy, Egipto o Gibraltar, que me da a mí que si me tomo las cosas de tan buen talante es porque con los críos en casa tampoco puedo bajar a tomarme un café con leche mientras leo el periódico y de ahí esta bonhomía, que no me la creo. Y si esto además de escribe y hasta se lee con el Blue Train de Coltrane de fondo, ya la hostia en verso.

ZURE KAINOARI LOTUTA...



Irudi honen aurrean zer pentsa, zer esan, akordura ziplo datorkizuna zure gaztaroko rock talde famatu baten bertsoak baino ez dira 

"Egun guztia irauten duzu
zure kainoari lotuta
beldurrak zaitu maskaratueta
enork ez daki nor zeran
ez du inporta galant ederra
mundu guztiak izena dauka eta
zurea, txakurra!
Odolaren usaina, biolentziaren erresumena.

Hori da bai gogoan dudana argazkitxo hau dakusadanean, ezin besterik auskalo zenbat aldiz gaztetan halakorik pairatu behar izan genuen batzuen zein besteen aldetik, hau da, indarra lege bakarra dutenengandik. Eta horrexegatik ere pistolari lotuta azaltzen den tipoak bertsoon akordua iradokitzen didate. Egipton suertatzen ari den orok atsekabetzen nau. Ez ditut gogoko Anaia Musulmanak, ez zaizkit batere atsegin euren joka/pentsamoldeak, beste hainbat herri mugimendurekin suertatu bezala gizabanakoaren borondatea, libertatea, taldearenaren mendean jartzeko jokaera dute eta, beldurrak nago hainbat egiptiar hiritarrekin batera demokraziaz baliatu nahi izan duten teokrazia bat ezartzeko asmotan. Horrenbestez, muzin egin behar diet nahitaez gure artean hainbat ezkerreko kidek haiekiko erakusten duten elkartasunari, hirugarren munduko babesle iraultzaileak edo sasiko askatzaileak balira bezala mendebaldeko interes beti maltzurren aurka, interesak interes ez balira bezala denontzat, mundua hauen arabera ez balebil bezala edonon. Baina jakina, egiptiar armadaren estatu kolpeak zein izugarrizko zapalkuntza odoltsuak ez dute zuribiderik demokraziaren mamia libertatea berma dela goresten dugunontzat, hots, gure arteko hainbat eta hainbat Maruhenda sinestarazten saiatu bezala. Herri hartan suertatzen ari den oro lardaskagarria omen da batez ere kanpotik ikusita, hausnartuta, ezin ditugu gertaerak behar bezala ulertu ez baldin bada halabeharrez gertutik ikusita edo, bestela betiko edo ohiko leloak zein aurreiritziak erabiltzera kondenatuta gaude, batez ere lelo zein aurreiritzioz kutsatzen eta etengabe mesprezatzen gaituzten hedabideen bitartez, normalean gure ezaupide ia bakarra. Nik maite dut Egipto aspaldi bertan egon nintzelako turista eta lurraldeak liluratu edo maitemindu egin ninduen, zinez diot, zoragarria bezain gogaikarria, nik uste pila bat irakurri dudala bertako historia, kultur zein gizarteaz, baina hala eta guztiz aitortu beharrean nago herri benetan ulergaitza begitantzen zaidala haren gizartearen nondik norakoak asmatzerakoan, hango bizimodua eta batik bat bertakoen pentsa/ikusmoldeak nireetatik oso urrin daudelako, han aurrerakoia dena niri zeharo atzerakoia begitantzen zitzaidan eta betiere nire mendebaldeko ikus/pentsamoldeetatik, nik uste ondo asko badakizkidala nireak, nire lehentasunak eta printzipioak, besteak beste gizartean emakumezkoei zein erlijioari dagokien lekuari buruzkoak, eta horrexegatik ere gaur ere Egipton gertatzen ari denari buruz aburu zuzena edo izatea ia ezinezkoa suertatzen zait.

HANDIUSTEKERIAZ


Handiustekeria, hau da, zure burua berez handia dela uste izana gainontzekoen aldean. Badago horrelako jende pila, gainerakoei betiere gainetik begiratzen diena, gainerakoak etengabe epaitzen dituena haiek bezalakoak ez direlako, haiek bezala pentsatzen ez dutelako gehienbat, haien mailara iristen ez direlakoan ere bai. Hortik sortzen zaie ere gainerakoeganako erdeinua, gainerakoekiko ezinegona, kosta egiten zaie itzel haiek ez bezalakoak ez diren gizabanako gehienen ondoan egotea, zeren ez baitaude eroso ez baldin bada haiek etengabeko juzgupean edo izanez, ez baldin bada gainerakoei zer eta nola egin/jo behar duten euren bizian aholkuka eginez, euren mailakoak ez direnak betiere haiek baino apalagoak, kaikuagoak, zatarragoak, txikiagoak direlakoan bizi baitira. Orain bai, handiustekeriak hamaika aurpegi ditu, besteak beste, eta agian gordinena edo nazkagarriena, besteek zu derrigorrez miretsi behar zaituzten uste sendoa, zu etengabean limurtu edo goraipatu behar zaituztena nahitaez, zu bai berezia zarelako. Eta jakina, handiustekorik petoena omen da zu nerabetzat hartzeko joera duena eta horrenbestez betiere zuri aholkuka edo aginduka ari da bere heinera moldatzeko asmotan.

viernes, 16 de agosto de 2013

AIDE ANDIOK BIDALDU DEUSTAE




"Aide andiok bidaldu deustae, abuztuko egun sargoritsu honetan, nire herriko jaiak azkenekoz ere derrigorrezko ajeaz pasata, nire doktoretza-tesa aurten behin betiko bukatzeko eta batez irakurtzeko hamaika paper sorta eta liburu mardul-mardul. Bihar bertan buru belarri hasiko naiz. Ezinbestean, nire senide, adiskide eta lagun gehienek Mediterraneo aldeko kostalderantz ihes egin bitartean nik udako uporrei uko egin diet gaur arte ziborratzera soilik heldu naizen idazlana, karrera orain dela hamar urte bukatu nuenez geroztik, behingoz burutzearren. Behartuta, datorren ikasturtean fakultatean euskal adarreko ordezko irakasle izateari uzteko aukera ezin hobea izango dut Aro Berriko Historia irakasle izateko lehiaketa baldintzak argiratu orduko, doktoretza ezinbestekoa suertatzen zait eta, aintzakotzat hartuta ere dagoeneko bost urtetan astero bizpahiru orduz Kristau munduaren haustura eta katoliko eta protestanteen arteko gatazken edota Espainiar Koroak bere lehentasunari eusteko aurrera eraman behar izan zituen ahalegin itzel zein borroka amaigabekoen kontura hitz eta pitz ihardun dudana".

MALA GENTE QUE CAMINA, OTRA, SIGUE Y SUMA.



Creíamos que uno de los pilares de un sistema democrático era el derecho a manifestarse, el derecho a la pataleta. Pero claro, creíamos tantas cosas, empezando como que la nuestra era una democracia homologada a las de nuestro entorno más inmediato, y resulta que como mucho, y siendo generosos, a la de la Italia de Berlusconi. La española es en realidad es una democracia puramente formal, que parece que lo es, que presume de serlo, pero la verdad es que es casi todo apariencia y muy poco de esencia, importa más la cáscara que el huevo. Y sobre todo que nadie lo cuestione, que como lo haga te sale al rato un Savater en plan abuelo cebolleta tirando de paternalismo y condescendencia, qué listo, qué listo, hasta escribe libros para ser mejor persona, que en seguida te cuelga el sambenito de antisistema aunque en realidad lo que pretendas y por lo que protestas sea porque el sistema no funciona como debiera, como te habían prometido con su constitución en la mano y todo, que crees que está corrompido hasta los tuétanos. Y en todo caso, si lo dices cosa mala, el Savater ese de turno, sandiosico donde los haya que diría el maestro, puede que no aplique toda su sapiencia en la denuncia de los abusos de los poderosos, pero sí en contra de los que están a los mismísimos de éstos y exteriorizan su descontento de la única manera que saben o pueden: en la calle.

Y qué otro ejemplo de lo formal de esta democracia que el ataque a ese derecho a manifestarse mediante subterfugios como el que la policía nacional imponga multas de cien euros para arriba a la gente que participa en las protestas contra el gobierno del PP. Pero no por manifestarse, eso no, por Dios, eso sólo en las dictaduras, ¡viva la Constitución!, tururú, sino por alterar el orden público, vandalismo contra el mobiliario público o puede que sólo por pisar el césped. Lo importante es que parezca un accidente, dice el Tony Soprano al mando, que no se note que lo que queremos es acallar la disidencia, meter miedo a la peña, dar por culo al ciudadano. Por eso nos inventamos normas o abusamos del reglamento al uso, hacemos como que no pero que sí. Si el derecho a manifestarse fuera concebido como un verdadero pilar democrático éste primaría sobre cualquier otra concepción que lo que debe ser el orden siempre y cuando no se atente contra la integridad de las personas o de sus bienes. Pero no es así, se abusa y arremete contra el ciudadano protestón a la vez que se pretende hacer creer al otro, a la mayoría silenciosa, esa que según Rajoy es mayoritaria y respetable porque no se mete en líos, está en sus casas delante del televisor a verlas venir, que el que lo hace es un peligro por principio para su integridad. 

Y así uno tras otro se van cargando los valores democráticos en pos de la sacrosanta inanidad política de la mayoría, la única a tener en cuenta porque como no se sabe que piensa podemos arrogarnos su representación descarada e impunemente. Más aún, como además estamos convencidos de que esos que pegan gritos contra los nuestros son cuatro gatos, que la mayoría esa de Rajoy ni siente ni padece y si lo hace es en silencio por si acaso, pues ya puestos hasta nos podemos dar el gustazo de insultar a un afectado por las preferentes, un jubilado víctima de la codicia de los bancos, porque ha ido a manifestar su malestar contra la señora De Cospedal. No pasa nada, sólo por haber osado salir a la calle a berrear su descontento el viejales ya es un antisistema y se merece todo nuestro desprecio. Eso y que además se les nota que el hombre les da asco porque es un perdedor nato y esta gente del PP no son tanto de derechas por una profunda convicción intelectual en los valores o las ideas conservadoras o liberales, como por una actitud ante la vida que les lleva a identificarse por principio con los poderosos, los que más ganan y mandan, los que siempre caen de pie, los fuertes, antes que con ese pueblo llano, del común, del que puede que procedan pero del que procuran que no se les pegue nada, no vaya a ser que por lo que sea acaben compartiendo el sino de muchos de ellos. Por eso, porque el núcleo de su ideología no es otro que el desprecio hacia los humildes, su miedo a ser uno de ellos, su lema principal parece ser el famoso "que se jodan", y ya todo lo demás a ver quién aguanta más, quién resiste lo peor de esta crisis porque la vida por algo es para ellos puro darwinismo social, cualquier concesión a la solidaridad social o lo que sea lo llaman sentimentalismo, nada práctico, económico, son cosas de perdedores, no de tíos listos que saben de qué va el rollo este de la vida como ellos, el que les permite, como poco, emular en lo más básico a los triunfadores que tanto admiran, entre ellos no pocos delincuentes. Pero eso sí, luego son unos patriotas, más españoles que nadie, lástima que en esa patria suya, que el sandiosico dice de todos a lo trágala, los demás, los perdedores, los que nada tenemos que ver con ellos, estemos cada vez más de sobra porque sólo les vale a ellos.

DÍA DE PLAYA


Yo, definitivamente, soy un tío de monte, que es donde mejor me lo paso, más disfruto, más satisfecho me vuelvo a casa. Me encanta bañarme en el mar, puedo estar horas en el agua danzando con las olas como cuando era pequeño y no había quien me sacara en Deba o Saturraran. Y también, también, he disfrutado de lo lindo en el agua con mis críos, sobre todo viéndolos a ellos que lo hacían, la cara de gozo infinito del pequeño cuando las olas, mínimas, de esta mañana arremetían contra él, o la del mayor desafiando a su padre a ver quién de los dos era más hijo de puta y cala primero al otro con agua fría. Pero, es salir del agua y empezar a agobiarme lo indecible. No me gusta la playa, me molesta hasta andar por ella, tumbarme encima. No entiendo qué placer encuentra la peña en pasarse horas y horas tomando el sol tumbado sobre la arena. A mí hacer de lagarto me parece eso mismo: un retroceso en la escala evolutiva. Dicen que para ponerse morenos, que así lucen más guapos. Como si a todo el mundo le sentara bien la piel oscura, como si a cada persona no le hubiera dado ya la naturaleza el tono exacto para resaltar su belleza o lo que sea, como si la piel blanca, pálida y hasta sonrosada incluso, no fuera hermosa; a mí, desde luego, es la que más me gusta. Nada más grotesco, por otra parte, que esas personas de físico y rasgos del norte de Europa tostados como sardinas en barbacoa. Y luego el agobio de tumbarse en la playa rodeado de gente que no tiene otra cosa que hacer que hablar a voces para dar a conocer su estulticia innata, gente que o va a pasar el día para rellenarlo con la nada absoluta, a exhibir gimnasio o una operación de tetas e incluso a hablar por teléfono a gritos para que todo el mundo que la rodea se entere de que ese día van a reservar en un restaurante caro y que no sólo se lo pueden permitir sino que además han pedido calamares frescos, "¡pero frescos, eh, que yo te los pago!", y tres bogavantes para cuatro, y "ya si eso que la niña se coma una chuleta de ternera". Pasar la mañana tostándose al sol mientras los granitos de arena se te acumulan en las pelotas o en las orejas es algo insoportable. Ni siquiera la escusa de la lectura justifica tamaño sufrimiento, el periódico se te llena de arena, el sol te nubla la vista sobre el texto y, ya digo, siempre hay algún gilipollas que te desconcentra porque, por lo visto, es muy importante que se entere toda la playa de que el chaval ha leído no se sabe dónde que los esquimales tienen cien palabras diferentes para nombrar la nieve: "¿dónde coño ves tú nieve aquí, sopla..." Y lo peor viene luego cuando por fin te marchas, que los niños ya se han rebozado de arena lo suficiente haciendo sus castillos de lo mismo y hay que recoger todos los bártulos previo paso por la ducha donde por mucho que lo intentes no falla, siempre acabas llevándote media playa a casa entre los dedos de los pies, la entrepierna o los sobacos. Y ya si eso, una vez en casa, no te creas que ya has dejado atrás el mal trago, que te puedes olvidar del todo de la dichosa playa, qué cojones, eso tampoco falla, una vez en casa no tardas en descubrir que, mucha crema solar y mucha hostia, pero, tienes la espalda quemada, algo que no te pasa cuando vas al monte ni aún poniéndote en pelotas, a mí desde luego no.

TXARRIMUSTURRAK


Urteko astebeterik luzeena duda izpirik gabe nire amaginarrebarenean, oporren bestaldea sorterritik bueltan, ezin ezer esan nire emaztea egon delako nirean bi astebete luze ere, gure egiazko etxera itzultzeko irrikan egonagatik, hemen oinpuntetan ibili ohi bainaiz etengabean, badaezpada, beti badaezpada eta ezin erneago ere sorginzuloko etxekoandrearekin iskanbilarik ez izatearren edozein huskeria izan daitekeela kausa. Aitzakia ordea sorginzuloaren ingurumarietara txangoak egitea omen zen. Zoritxarrez euria aritu zuen atzo eta herenegun, zuloan geratu behar. Areago, etxekoandreak herriko hainbat bizilagun zein beraneanterekin bazkaltzeko gonbidatu zigun, madrildar batzuek paella erraldoi bat prestatu nahi zuten eta. Eta bazaude, noski, ezagun ez duzun jendeartean ezin galduago, jende atsegina jakina baietz, baina hala eta guztiz ere ezin lekuz kanpoago zer esan edo zer egin ez dakizulako, ez baitakizu asmatzen zer esan edo zer egin, izugarri kosta egiten zaizulako ezer irizpidera ekartzea besteok zuri batere erakartzen ez zaituzten gauzez ari baitira hitz eta pitz, etengaben; niri behintzat autoak bost axola. Eta ez diozu, jakina, zure aldamenean zabaldu egin den solasbideari ekin nahi gaia eguneroko politika baita ez badakizu ondo asko sartzekotan laster berotuko zarela zurekin eta batez ere zure ikus/pentsamoldeekin zerikusirik ez duten lagunek inguratutik zaudelako, nolabait esateko munduko arazoak aurrekoari jipoika konpontzen direla uste dutenetarikoak eta bertako gehienak katalan zein euskaldunen errua direlakoan daudenak noski baietz, ez duzu inolako istilurik sortu nahi betikoaren kontura sorginak eta bere sorginkumeak gero betoskoa ipini ez diezazuten. Horrenbestez, baiezka zein ezezka egon zara bazkalordu osoan zure inguruko galderei soraio. Orduan, hiru platerkada paella irentsi eta gero, sukaldarietariko batek bazkaltzeko ere txerrimuturrak daudela iragartzen du. Burua galdu nuen, aitortzen dut, nik barruki-hondakinak eta itzel estimatzen ditut eta. Eta orduan bai, orduan platera auskalo zenbat bider txerrimuturrez bete eta gero, banuen nire mahaikideekin solasean egiteko hitz aspertu pila. Denetarik solas egin genuen barrukien kontura, baina nire gai nagusia arkume hanka/patorrilloak izan ziren, beharko, hori baita barruki kontuetan gustukuen dudana. Luzaz mintzatu ginen, luze eta goxo, baten batek Bosnian egon zeneko bildots hanka batzuk ere aitatu egin zituen sekula goxoen dastatukoa bailitzan. Eta bai, orduan ere eztarriratutako ardo ia mingotsa goxo eta oparo bilakatu egin zen otorduarekin batera. Hori da hori tripazorro baten mentura, bera bezalako beste batzuk topatzea ustekabean, tripontzikeriak denok lagun eta batez ere hiztun egiten bagaitu. Tamalez ere, jatun onak ez garenok tripazorri hutsak baino, badakigu zein izango zen gure penitentzia. Ez dut lekurik, ez gogorik, gaur gaueko tripa sufrikarioren nondik norakoak feisbukeratzeko. Izan ere, nik esango nuke txerrimuturrena norbaitek prestaturiko sorginkeria garbi-garbia izan zela aspaldi-aspalditik niretzat propio asmatua behin baino gehiagotan aitatu egin baitut hemengo astur tripakiak eta zer nolako gustukoak ditudan.

LUNES TRISTE Y LLUVIOSO...



Lunes triste y lluvioso como pocos, y como están de vacatas por Asturias quedamos en Avilés con mi primo, Marian y los dos enanos de éstos, Uxue y Eneko. Les enseñamos la villa, antes de ponernos como el quico con sidra y excelencias asturianas -que estos de Vitoria no han probado ni en sueños el emberzado, la longaniza de la villa o un entrecot de buey/vaca vieja como los de aquí, le decían chuletón y todo...-, con sus soportales, placitas y parques con estanques, patos, columpios y toda la hostia. Avilés no es sólo una desconocida sino también una mal reputada, que no sé yo si se ha publicitado lo suficiente el cambio que ha experimentado de aquella ciudad fea y gris, industrial, a esta de ahora con pujos de ciudad turística gracias al Niemeyer y uno de los cascos urbanos más particular y mejor conservado de Asturias.

Ahora bien, a la tarde paseamos hasta el Niemeyer y tras explicar, o más bien intentarlo, de qué va la cosa y por y para qué, que si no pueden hacerlo las autoridades que lo mandaron construir a ver cómo va a hacerlo el común de los mortales, servidor no puede evitar una sensación de tristeza infinita paseando entre la ocurrencia postrera o casi del recién fallecido arquitecto brasileño. Claro que aquí hay que andarse con cuidado, o eso parece, porque en seguida te miran o te juzgan mal a poco que tires de sinceridad, de decir las cosas tal como las ves o las crees, consciente, eso sí, de que todo lo que dices no vale más que lo poco que sabes y se funda en su inmensa mayoría en lo que presumes, que tu opinión no es ni más ni menos que una entre un millón y producto exclusivo de impresiones antes que de convicciones. Hablas de un proyecto absurdo que partía de la peor premisa de todas para estas cosas: la cáscara antes que el huevo. Y en efecto, el único huevo que hay es ese cocido al que parece asemejarse el mayor de los edificios del complejo... ¿cultural? de Niemeyer. Pero claro, quieto parado, que el cascarón no tiene la culpa de nada, esto es, de que no se sepa qué coño contiene, para qué está concebido en realidad. Cosa cultural, dicen, exposiciones, conciertos... todo muy genérico, si las cosas se hubieran hecho bien habría sido la bomba, dicen. El Patronato o lo que fuera que conformaban aquellos tipos a los que les otorgaron plenos poderes para hacer y deshacer a su antojo tiene la culpa de que las cosas se hayan hecho tan mal, que lo que iba para referente cultural de este rinconcito del Cantábrico se haya convertido en un no se sabe muy bien qué. Y sí, cada cierto tiempo aparecen en prensa noticias del cachondeo presupuestario de los miembros de dicho patronato o lo que sea, que si viajes en familia y farras de todo tipo a cargo del dinero de todos los asturianos; esto ya casi que también una historia de entre miles de la España del delirio despilfarrador propio de una sociedad de nuevos ricos o más bien que creyeron serlo. 

Pero no es sólo eso, es que el Niemeyer aparte de haber sido concebido para ser el Niemeyer y poco más en la convicción de que eso bastaba ya para repetir en Avilés el efecto regenerador de otros edificios emblemáticos en entornos depauperados, también es un conjunto arquitectónico horrible, anacrónico, casi que de barraca de feria. Y esto ya no, esto no se puede decir porque ya te estás metiendo con Avilés, Asturias y hasta con los cojones de Pelayo, que de entre las inagotables manías de la especie a la que pertenecemos también está la de hacer patria de las ilusiones de sus gobernantes, patrimonio recién incorporado a lo que consideran su paisaje emocional, patrio, y como encima critiques siendo de fuera, zas, que si a ver de qué vas, que si te crees mejor por ser de.... bla, bla, bla. Fatiga y poco más toparse con este tipo de gente, se acogen a algo tan nimio por acogerse a lo que sea con tal de rebatir lo que no les gusta oír por principio, que todo lo del Niemeyer suena a paletada institucional a gran escala, que el brasileño parece que se sacó del cajón un proyecto que tenía abandonado/aparcado de aeropuerto y se lo colocó a los asturianos cuando fueron a pedirle algo para Avilés porque su nombre era el que más les sonaba en eso del star system de los arquitectos de relumbrón y para de contar. Y sí, ya que está hay que aprovecharlo, sin lugar a dudas, no se puede tener un conjunto así sólo para que vayan a visitarlo los gafapastas de todo tipo, edades y nacionalidades atraídos en exclusiva por el nombre de su autor, habrá que darle un uso definitivo y racional a las instalaciones, puede que hasta abrir de seguido el restaurante en esa torre de control de chichinabo; pero, por favor, que lo hagan cuanto antes, antes incluso de que el inmaculado hormigón acabe de ennegrecerse ya del todo y no se pueda distinguir del resto de edificios de su entorno. Y siempre quedará la duda de que si los del estudio del nonagenario arquitecto se hubieran molestado en integrar o adaptar su proyecto al entorno industrial de Avilés en vez de construir uno cualquiera como los que se pueden encontrar en Brasilia, pues oye, quizás ahora no tendríamos un falso aeropuerto al lado de la ría avilesina. Pero eso sí, sólo hay que ver las fotos aéreas de/y las maquetas del proyecto que exhiben en el prescindible edificio de acceso al conjunto para entender por qué no pudieron resistirse los mandamases de la región al proyecto de edificio emblemático que les pusieron en bandeja; "son tan bonitas, ¡por qué no podemos tener el nuestro?" Pues eso, impresiones y poco más, a ver si ya que está se consigue sin más tardar que se cumpla siquiera la mitad de las expectativas puestas en él, la ciudad de lo merece.

viernes, 9 de agosto de 2013

A LO LARGO DEL ARROYO DEL INFIERNO




Hoy ha tocado una excursión por la zona recreativa de La Pesanca, pasando Espinaredo, en el concejo de Piloña en Asturias. Un paseo suave y ameno a lo largo del cauce montañoso del río Infierno en la zona forestal que llaman Arboreto. Y como el nombre del río se las trae, que parece que este verano estamos monotemáticos, los críos venga a pedir historias de brujas, hadas, troles, y gnomos si bien ahora nos tocaba a su madre y a mí cambiar las sorginas, lamias, basajaunes y galtzagorris por bruxas, xanas, bosgosus y trasgus, cambian los nombres pero apenas los personajes o el contenido de sus leyendas, un acerbo común (indo)europeo que hace las delicias de los canijos y a los mayores con un poco de imaginación nos sirve para tenerlos entretenidos mientras caminan casi sin darse cuenta monte arriba. Porque de eso se trata y de no otra cosa, hacer pierna mientras disfrutas de la naturaleza, de la belleza paradisíaca o casi de los bosques asturianos, que aún en verano y como ha llovido los días anteriores todavía es de musgo, barro y arroyos que bajan entusiasmados, más a voces que susurrantes como suele ser el lugar común. Todo muy bonito, bucólico y hasta sano, dicen, eso si servidor y su señora no estuvieran ya hasta los mismísimos de los críos, que mira que han caminado este verano, trayectos de ocho y más kilómetros y los cinco o seis desde la casa de mis padres hasta Vitoria. Y no se me quejaban o no se daban cuenta, que a ver de qué los iba a dar yo con fusta alguna para alcanzar la taberna de turno en búsqueda de la jarra de cerveza reponedora o el botellín de agua o kas naranja para ellos; no, no soy un padre tan desalmado, tanto no. Pues oye, que parece que desde lo de Bertiz y Saseta los críos me han perdido fuelle. Ya estaba el pequeño tocándome los cojones para que le subiera "arricotes" nada más bajarse del coche. Y no había pasado una hora cuando se unía el mayor con su letanía del "estoy cansado, no puedo más, quiero agua". Así que poco o nada se puede hacer, no hay paisaje agreste, murmullo fluvial o sombra boscosa que valga, ni siquiera te sirve ya hacer pasar a las lagartijas del camino por "herensuges" o "cuéllebres", cuando se te pone la muchachada en ese plan quejoso, canso que decimos allá, o los tiras directamente al arroyo que corre a tus pies o te rindes con todo tu bagaje a la evidencia de que no hay peor carga que arrastrar o cargar al hombro con semejantes fardos. Claudicas en lo de alcanzar la meta juntos, te vas tú hasta ella por tu cuenta y por tus santos cojones, los recoges de vuelta de ésta -a los críos, no a los cojones-, y ya si eso a ver si llegan sin dar demasiado el coñazo hasta el área recreativa con el fin de dar debida cuenta del bocadillo de pan untado en ajo con bacon frito y fritada de tomate, el de la misma fritada con tortilla francesa y las birras con suerte todavía frías. Me da que no va a haber más caminatas de este tipo para lo que queda del verano, mi espalda, mis hombros, no pueden cargar ya ni con el canijo, ni con tanta responsabilidad, y tampoco mis oídos están dispuestos a soportar la monserga del "quiero quedarme a jugar en casa de los yayos". Pues venga, yo también quiero otras cosas, para estar apalancado en territorio extraño prefiero volver al mío con mis cosas y mi rutina. Ya veremos, igual mañana o pasado se me cruza el cable y me los subo hasta el Sueve tirando de las orejas.