martes, 1 de noviembre de 2016

NOCHE LOCA DE HALLOWEEN




Me despierto con mi hijo pequeño en la cama una vez recuperada ya mi forma humana.

-¿Dónde está mamá?

-Creo que me la comí anoche cuando era un hombre lobo. Menudo empacho.

-¿Y qué tal estaban las tetas?

-Como flanes.

-¡Ese niño de la foto soy yo! -señalando una que cuelga de la pared de nuestro dormitorio.

-Sí claro. ¿Y a que no sabes de quién es la foto que está al lado?

-Sí, de mamá cuando era pequeña.

-Umm, tenía que habérmela comido entonces; seguro que estaba más tierna.

-Pero entonces no habrías comido flanes...

No hay comentarios:

Publicar un comentario