jueves, 4 de febrero de 2010

TIEMPU DE LLOBERU


Febrero, en vasco otsaila, esto es, otso-ila o "mes de lobos". Habrá qué echarse a temblar, pero no precisamente por la centena de lobos o así que debe quedar en la península (aunque dicen que no hace mucho han rebasado el Duero, su frontera desde hace varias décadas, para deleite de ecologistas y horror de pastores para los que las idemnizaciones por oveja muerta nunca son de su gusto) o porque anda mucha loba suelta que se me puede echar al cuello, quiá, sino más bien porque ésta, Asturies, es tierra de lloberus o "hombres lobo", (al igual que de "lobishomes" en su parte más occidental y galleguizada), y yo ya le he echado el ojo a un vecino y para mí que tiene demasiado pelo y me da que aulla más de lo normal por las noches, cabrón suertudo. Claro que para hombres lobos ahí tenemos a la Esperancita Aguirre, fiera donde las haya, en especial con los de su propio rebaño, miedo da tenerla en el mismo equipo, a saber cuando se te tira al cuello, auuuuuhhhhh. También encontramos otros lobos más entrañables, en concreto don Baltar, esa versión galaico-caciquil del "lobishome", el cual funda su propia dinastia contra viento y marea, o seáse, contra Feijoo y Rajoy. Enternecedor eso de oírles a los abueletes hablar de lo agracedidos que están y le estarán siempre por haberles colocado al hijo y hasta al cuñado en no sé qué puesto anteriormente inexistente de la diputación orensana. No va a ganar por goleada ni nada en esa provincia, si ha colocado a la mitad, hasta dicen que se sacó de la manga no sé qué otro cargo de campanero mayor de una ermita en ruinas para el sobrino del alcalde de no sé dónde, un hacha, y por favor, declaración de museo temático del caciquismo para Orense ya, pero ya mismo.

Y no, no vamos a mirar para el otro lado a ver si encontramos sus equivalentes, ya que neutralizados Bono o el bocazas extremeño, apenas quedan voces discordantes como el Barreda, tanto como necesarias, de los pocos en el PSOE que, o se han dado cuenta, o por lo menos se atreven a decir en voz alta lo que piensan y no les da por dar balidos a lo Chacón, Pepiño, Aido o similares, que si los de enfrente van de lobos, que no dudan en clavar el colmillo en la crisis con tal de sacar tajada, el Zapatero, pobrecico, no pasa de cordero; será que porque ya se ve en el matadero se ha ido a rezarle a Obama. En fin, no sé ni para qué ni por qué he acabado hablando de la patética política, si yo sólo queria divagar sobre el mes de los lobos, de hecho lo que tenía en mente era aprovechar la coincidencia para cagarme en todos los muertos de los municipales de Oviedo, que esos si que son alimañas y de las peores. Pero mira tú, entre el sueño que tengo y lo triste que está todo con el orbayu/sirimiri de los cojones, como que se me han quitado las ganas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario