Como he tenido que salir en coche muy de mañana, he aparcado en el garaje de un super de la zona para aprovechar a hacer unas compras. Así que le pregunto al encargado que había en el garaje cuánto tiempo gratuito tenía para hacer las compras, y va él y me contesta dedicándome un guiño de complicidad:
-Para los hombres es gratis todo el tiempo que haga falta...
-¿Que es la nueva política machista de la empresa o qué?
-pregunto yo con toda la malicia del que sabe que tiene al otro cogido de los huevos.
-¡No por Dios, ni mucho menos! Era una broma, solo una broma, no vaya a pensar que...
Y luego voy y resulta que no había conejo troceado, ni cordero, ni nada para el guiso con alcachofas rebozadas, champiñones, zanahorias, guisantes y unas pataticas que tenía pensado para hoy; he tenido que comprar pollo. Y encima se me ha acabado el vino del año y aquí no pillo un cosechero de mi tierra ni harto de vino, valga la redundancia. ¿Pero qué puta mierda de vida es ésta?
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