DOGMÁTICOS

-¿Que cuándo me convertí en un dogmático?

-Sí. ¿Cuándo?

-Supongo que cuando deje de dudar de todo, cuando ya no tuve duda de que mis ideas eran las correctas y las de los demás no, cuando los que no pensaban como yo empezaron a molestarme, cuando empecé a evitarlos, a despreciarlos e incluso a odiarlos, cuando acabé rodeándome en exclusiva de gente que pensaba como yo, cuando llegué a la conclusión de que el mundo sería un lugar mucho mejor cuando estuviera habitado única y exclusivamente por gente que pensara como yo. Pero, me di cuenta que era un dogmático de verdad cuando...

-¿Cuándo, cuándo?

-Cuando perdí el sentido del humor, no entendía la ironía, más bien me irritaba, y todo aquel que la empleaba merecía mi juicio más severo, a algunos incluso los habría quemado vivos...