miércoles, 14 de octubre de 2009

tarde de marujeo en los columpios



Como cada día, y según dicta la condena por haber traído un monstruo al mundo, he llevado al mio particular a los columpios. Como al nene no le molan demasiado los que tenemos a la vuelta de casa, he tomado la decisión de adentrarme más allá de la carretera que circunvala el centro donde vivimos, es decir dentro de uno de esos otros barrios ignotos y peligrosos donde nunca sabes si te vas a encontrar con un polideportivo o una horrible estatua de un artista local. Por suerte hemos dado con un parque para nenes donde había un peazo de castillo de no te menees, q ha sido soltar a M y subirse de un salto al tobogán tras tirar un par de mocosos a su paso, como estaba abarrotado de guajines en pleno éxtasis columpiero. Vamos, un verdadero suplicio, sólo se oía, eeeenhhehepasamelapelotañeñeñeñeñemamamecaídooooooñoñoñoñoño. Y encima petado de padres y ni un puto banco donde depositar el trasero. Total, que entre que me acercaba a M para regañarle cada dos por tres por escupir a las palomas, ahuyentar a las niñas e intentar arrancar uno de los postes del tobogán, también he tenido que soportar el acoso descarado de varías madres con las más aviesas de las intenciones: ¡¡¡querían entablar conversación conmigo!!! Vamos, hombre, para hablar de mocos, coles y caiditas de roma o de no sé donde estaba yo. No te jode, q era pegar la oreja sin querer, sólo sin querer, y madre de Dios, como te topes con una de esas que es abrir la boca y no cerrarla hasta que le ponen la tapa del ataud encima ya la has cagado. Como q veía a un grupo de ellas atendiendo la cháchara interminable de otra con unas caras de resignación infinita, ganándose el cielo en la otra vida y por estilo, acaso convencidas de que eso les iba en el sueldo o el título de madres, y me preguntaba, ¿nadie le va a decir que su nene es tan guapo y listo como los de todos, que todas y cada una de las cucadas del suyo también las hacen los otros, que no hay nada de especial en que el suyo ya haya aprendido a contar hasta tres con cinco años????? En fin, tarde de trivialidades como ésta que ahora escribo. Pero qué le voy a a hacer si con esto de la recuperación de mi señora lo más lejos y aventurado que salgo es al barrio de Pumarín, y sin machete ni nada, con la de crisis que hay, lo borde que soy, el caso Gürtel, la espantada de Alonso por lo del blindaje del concierto, tachán-tachán, y Zapatero de visita a Obama, oh, Obama, el próximo nobel de medicina q se lo den a un estudiante antes de acabar la carrera, porsiascaso... Por cierto, ya comienza a refrescar, ya era hora, cómo me gustan las estaciones como deben ser, que empiece ya a caer hojas...

2 comentarios:

  1. Pero si hace 4 días te quejabas del frío y ahora lo estás suplicandooooooooooooooooooooo

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  2. Porque en el fondo soy una persona de usos y costumbres, me gusta q en verano calor, en otoño fresco, en invierno un frío de cojones y en primavera florecillas y alergias. Lo contrario, como nos amenazan con el cambio climático de las narices, es el trópico todo el año, qué horror, vamos a acabar como en el anuncio de "mestas estresandooooo..."

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