Podría decir que cada vez que vuelvo al txoko y leo los titulares de los periódicos locales me sorprende el contraste con los que veo a diario en la prensa asturiana. Claro que podría y hasta quedaría fetén. Pero sería una pose, mentira cochina, porque gracias a internet la verdad es sigo leyendo más titulares de la prensa vasca que de la asturiana, entre otros muchos más, claro está.
Con todo, lo que es verdad es que el contraste entre una actualidad más o menos previsible de las noticias locales, previsibles, de una región como Asturias, noticias que te puedes encontrar con otros nombres y escenarios en cualquier otra región o país del globo terráqueo, siquiera solo del occidente más o menos próspero, europeo o europeizado, y las de esa otra cotidianidad en las que las noticias relacionadas, de una u otra manera, con el terrorismo son lo habitual desde hace décadas.
Ya no se habla de atentados, secuestros, detenciones ni nada por el estilo; pero, las noticias más o menos candentes relacionadas con ETA y sus inmediaciones siguen siendo el pan de cada día, ya sea a cuenta del cese de marras y sus consecuencias o de las consecuencias de décadas de terrorismo sin más.
Hoy sin ir más lejos El Correo traía en portada una noticia que de novedad tenía la que le querían dar sus responsables, y me da que encima a lo amarillo:
El fin de ETA abre un abismo entre la sociedad vasca y la del resto de España
Frente al 60% de españoles que duda de la desaparición de la violencia, en Euskadi el 75% lo da por hecho, según el CIS
Luego ya se extienden con lo de que tampoco se ve igual a un lado del Ebro que en el otro (esto lo repito a menudo porque es una expresión acuñada aquí desde los tiempos de Maricastaña) el asunto de los presos, el de las víctimas o el de la legalización definitiva de la izquierda abertzale. En fin, no entra en el ánimo de esta entrada profundizar en el tema, más bien divagar, acerca del abismo ese, mental, que nos separa. Que a un lado y otro de esa línea imaginaria, esa muga metafísica, que los de aquí sabemos que nos divide a fuerza de Historia más o menos manipulada, y los de allá se niegan hasta a verla, las cosas relacionadas con el paisito se ven de muy distinta manera es más que sabido. En lo que algunos de aquí llaman el resto de España, muchos del Estado y ya sabemos quiénes la puta España, es un asunto de lo más obvio, criminales que tienen que cumplir su condena y punto pelota, a este lado de la muga dichosa es algo pelín más complicado, es algo que tiene que ver con el día a día, con el pariente o el amigo, con el dolor a flor a piel, la necesidad de curar heridas, con muchas cosas que al otro lado suenan al raca-raca de siempre de esos putos vascos pesados dando la murga todo el día con lo suyo, henchidos de identidad y tontería nacionalista, ensoberbecidos en sus diferencias mínimas con el resto, aprendices de nazis y en general de todo lo que se les ocurra a los de la caverna mediática que parece dirigir, cada vez más en exclusiva, la opinión del españolito de a pie.
En fin, cada uno que se lo coma con su pan y txistorra, que yo me temo que el número de gente que cada vez está dispuesta a meterse en la piel del otro aparcando por un rato sus convicciones de piedra es más escaso, que la disposición más generalizada del personal no es precisamente a difuminar esas fronteras metafísicas, conceptuales, socio-políticas, sino más bien todo lo contrario, a atrincherar tras ellas, que es donde se está más calentito, ahí, ahí, al abrigo de las cuatro ideas sobre todo, fuera corren peligro de ponerse a pensar y que, de resultas, padezcan un cortocircuito.
Así que yo a mis chorradas, a rastrearlas entre las noticias de la actualidad. Y como ya digo que lo de ETA y sus inmediaciones forma parte de lo cotidiano también en la prensa local, que no hay día que no haya noticias de manifas pidiendo una cosa u otra, plataformas o recogidas de firmas otro tanto, declaraciones de un lado o del otro, noticias de domingueros que encuentran zulos en el monte, de familiares de presos que se quedan en la carretera, de víctimas de ETA que se encuentran profanada la tumba de su ser querido, de ese bar de lo viejo al que entraron los zipayos como elefantes en una cacharrería porque alguien les llamó para chivarse de que habían visto una hucha con no sé qué pegata a favor de los presos, pues que tampoco extraña mucho encontrarse una como la que sigue y que además dice mucho de cierta idiosincrasia patria:
Condenado por meter alcohol para un preso etarra en una cárcel francesa
La Justicia francesa ha condenado al amigo de un preso de ETA por una tentativa de introducir alcohol en un penal de máxima seguridad. El sentenciado llevaba un permiso de visita a nombre de Iñaki Lizundia Alvarez, que cumple una pena de 16 años en la prisión de Moulins (centro de Francia) por tirotear a un gendarme sin herirlo en diciembre de 2001.
Los hechos tuvieron lugar el último fin de semana de noviembre en uno de los controles de acceso a los locutorios penitenciarios. Los vigilantes descubrieron que el visitante llevaba encima varios recipientes que contenían bebidas alcohólicas, prohibidas en el interior del penal, y lo detuvieron.
Se trataba de vino dulce, trasvasado a dos tarros de yogur de 20 centilitros, y de licor, en un envase de 12 cl., que al principio se pensó que era etanol (alcohol puro). «Era algo muy artesano y abocado al fracaso», señalaron fuentes judiciales, quienes subrayaron el riguroso sistema de seguridad de la prisión.
Yo me imagino una conversación previa entre el etarra preso y su amigo tal que así:
-Oye, Iñaki, que si quieres que en la próxima visita te meta una lima en el bocata o cualquier otra cosa para darte el piro de aquí.
-No me jodas, tú. Si aquí se está de puta madre, ahibalahostiapues. Lo único que en el supermercado solo hay para privar mierda gabacha de esa, así que si eso la próxima me traes algo de Rioja, patxarán o en su defecto un poco de moscatel para hacerme unas txintximinas (moscatel con ron)...
*luego ya esta noticia habría que relacionarla con esta otra de no hace mucho:
La policía francesa detuvo ayer de madrugada en el centro de París al presunto militante de ETA Iker Esparza Ortega armado con una pistola robada en Francia durante la última tregua y en avanzado estado de embriaguez. El arrestado, al que los servicios antiterroristas vinculan con la falsificación de documentos de identidad, tiene un hermano preso en una cárcel gala en la que purga condena por pertenencia al aparato político a comienzos de esta década cuando disponía de una oficina clandestina al pie de Montmartre, una de las zonas más turísticas de la capital francesa.
Fuentes judiciales francesas afirmaron a este periódico que el etarra se encontraba en «estado de impregnación alcohólica muy avanzado». De hecho, a media tarde de ayer, permanecía recluido en una celda especial para esos supuestos sin haber sido interrogado todavía ya que «no había metabolizado todo el alcohol» y se mostraba «incapaz de expresarse de manera consciente».
Anda que no son hijoputas ni nada los gabachos, como que no se nota que con eso de que era «incapaz de expresarse de manera consciente» se estaban refiriendo a que el detenido debía haber estado tarareando alguna canción en euskera del tipo; bat, bi, hiru, lauuuuu, bost, sei, zazpiiiii, euskaldunaaaak, irabazi, irabazi, aurreraaaaa!!!! París es tan pequeño que no se ve en el mapaaaa, pero bebiendo vino lo veo yo y el Papaaaa
No hay comentarios:
Publicar un comentario